Impacto económico y comercial en la región centroamericana del conflicto entre la Federación de Rusia y Ucrania

En los últimos dos años y medio mucho se ha escrito sobre el conflicto de Rusia y Ucrania. Los textos versan de diversas áreas temáticas como el armisticio, los conflictos bélicos, la paz mundial, el comercio internacional, las sanciones económicas, las influencias y tendencias políticas de los diferentes países, las migraciones de los civiles afectados por el conflicto, los impactos económicos, entre otros. Los autores se enfocan en diferentes zonas geográficas, priorizándose en muchos casos los efectos a los vecinos más cercanos como  países europeos y asiáticos.

Este artículo se diferencia de los demás porque viaja a explorar los efectos económicos que el conflicto ha tenido en una zona geográfica (Centroamérica) que se creería es bastante alejada de su epicentro, haciendo énfasis en cómo el comercio internacional en la región también ha sido impactado por el enfrentamiento entre Rusia y Ucrania. Las cadenas globales de valor ya habían empezado a ser reconfiguradas por la pandemia Covid-19 y las políticas proteccionistas de algunos países influyentes. El conflicto ruso-ucraniano agudiza dicha reconfiguración de cadenas globales de valor, impactando los precios de alimentos y energía que se consumían en los países centroamericanos.

En este artículo se exploran las oportunidades que tienen los países de la región para minimizar ese impacto, como lo son: la diversificación de rutas comerciales, el fortalecimiento de lazos con nuevos socios comerciales, la promoción de políticas públicas que impulsen producción local, cooperación regional, inversión en infraestructura, entre otros. Siendo al final el fin último el depender menos de los bienes y servicios que importábamos de la zona de conflicto.